Volvemos

by Basketistas

Pasado el ecuador del mes de agosto, queda ya lejano el final de temporada. Desde junio con la conclusión de la liga y el cierre de la competición de copa habrá habido prácticamente dos meses de inactividad, de desconexión en mayor o menor medida del basket, del equipo.

Se suele coger con ganas este parón vacacional y más si viene tras una temporada un tanto tumultuosa y “áspera” por decirlo de un modo gráfico. Es un tiempo necesario para dejar reposar emociones, para poder hacer un análisis pausado y en frío de todo lo acontecido y valorar sobre las decisiones a tomar, las actitudes con las que afrontar la nueva campaña y muchos otros pormenores del futuro inminente.

La pretemporada está ya a la vuelta de la esquina, una semana queda para que empiecen los entrenamientos en la mayoría de los equipos. Ganas de reencuentro en las chicas con sus amigas. Los primeros días de pretemporada suelen ser sufridos, la inactividad y los posibles excesos se van a notar y por ello hemos dispuesto de unos ejercicios mínimos de tonificación o puesta a punto para que la reentrada con los entrenamientos no sea tan traumática. Es de suponer que se habrán intentado hacer, bien por cumplir, bien por intentar estar a un tono aceptable para el entrenador a la vuelta de las vacaciones, por autoexigencia…

Vendrá luego esa pretemporada de entrenamientos con más o menos carga física, con mayor o menor cambio en conceptos tácticos y técnicos por el cambio de entrenador y sobre todo ganas de empezar a competir. A fin de cuentas, la competición es la salsa de este deporte.

Tras el inicio de la pretemporada empezará el curso escolar y ya en octubre vendrá la liga. Por el camino se habrá trabajado y el entrenador habrá decidido sobre la composición de los equipos A y B, sus plantillas estables y aquellas que se moverán entre ambos.

En este próximo curso el gran reto es trabajar y aunar a todos los que los años pasados fueron A y B bajo un mismo objetivo, una filosofía y una forma de trabajo. Tocará poner todos la mejor predisposición porque de lo contrario se volverá a caer en errores del pasado que nadie debería de querer repetir.

En cualquier caso, para todos, los que sigan en la agrupación y los que decidan cambiar de aires, mucha suerte en la temporada que está a punto de comenzar. Que la próxima campaña, sea donde sea, suponga una mejora notable respecto a las últimas.

Feliz vuelta a la actividad. Disfrutemos del deporte.

¡¡Viva el Basket!!

Deja una respuesta